LA ESPONJA KONJAC

Hoy voy a dedicar mi tiempo a un artículo de belleza que para mí ha sido una de las mayores revelaciones a nivel de mis inquietudes en el mundo de la cosmética: la esponja limpiadora con raíz de Konjac. Se trata de una innovadora esponja limpiadora 100% natural, libre de colorantes y conservantes.

Esta esponja se obtiene de una planta japonesa  y coreana con el mismo nombre. Esta planta asiática, también conocida como Konnyaku,  contiene un alto contenido en fibra y es ideal para todos los tipos de piel gracias a su delicada acción exfoliante sobre la piel. Se puede utilizar por la mañana y por la noche, siempre muy humedecida en agua y con el rostro ya desmaquillado,  masajeando de forma delicada. Después de utilizar la esponja es conveniente enjuagarla y escurrirla. Gracias a su cordón, se puede atar y dejar secar al aire. Cuando la esponja se encuentra seca se queda rígida. En el momento que la volvemos a sumergir en agua, vuelve a adquirir su suavidad natural.
La ventaja para mí de esta esponja es que puedes ahorrarte jabones faciales y geles exfoliantes. Yo estoy totalmente en contra de este tipo de geles, los considero muy agresivos para el cutis. La exfoliación de la esponja Konjac es tan suave que no irrita ni crea el indeseable efecto rebote de otros productos. Elimina también células muertas, dejando la epidermis facial tersa y preparada para cualquier crema hidratante. Además también es un producto extraordinario para evitar el acné. Pese a que en ningún lugar se especifica que se pueda hervir, yo la hiervo cada semana para desinfectarla y se mantiene intacta. Podemos encontrarla en la sección de perfumería  del Mercadona. Sin duda, otra gragea de la felicidad...