PLACERES ORIENTALES EN MI DUCHA

Uno de los mayores placeres con los que cuenta la sociedad moderna es la ducha. ¿Quién no disfruta de ese gran momento de relax y placer bajo el agua? Últimamente, la tendencia en la higiene corporal son los geles y jabones con aceite de Argán, procedente del árbol marroquí Arganda Spinosa. Se utiliza tanto en la industria cosmética como en la alimentaria. A nivel cosmético contiene una considerable cantidad de vitamina E, ácido oleico y ácido linoléico, adquiriendo así unas excelentes propiedades para la piel, las uñas y el cabello, eliminado las células muertas y renovándolas más rápidamente. Mejora la oxigenación de la piel, brindándole hidratación y elasticidad, así como alivio y regeneración de las quemaduras solares. Dedicaré este artículo a tres placeres de ducha que contienen el ya citado aceite:

1- Jabón oriental con aceite de Argán biológico de la marca Yves Rocher: este jabón asocia  las propiedades nutritivas del Aceite de Argán biológico de Marruecos a las propiedades del aceite de oliva. Utilizado diariamente en tu ducha, este jabón suaviza tu piel a la vez que la limpia perfectamente. Con un intenso y embriagador perfume nos transporta a un universo de verdadero placer. Las mayores ventajas que le encuentro a este jabón es que deja la piel muy suave y su perfume incita a olerlo constantemente. Sin embargo, desde mi punto de vista es un poquillo caro.

2- Oro líquido (gel de ducha) de la marca Instituto Español: este gel está elaborado con aceite de Argán, oro coloidal y karité. Los Coloides de oro son un suplemento mineral totalmente natural compuesto de nanopartículas de oro electromagnéticamente cargadas y suspendidas en agua destilada. Utilizado tanto en medicina como en cosmética, el oro coloidal tiene un efecto de equilibrio y armonización en todos los niveles del cuerpo, mente y espíritu. Se usa para mejorar la actitud mental y los estados emocionales. Se ha reportado que promueve un incremento de la energía, la voluntad, la libido y la concentración mental. Hidrata intensamente la piel, estimulando la síntesis del colágeno y protegiéndola de las influencias cotidianas del medio ambiente, lucha contra el envejecimiento celular, nutre la piel, creando un escudo protector. La manteca de Karité (procedente de un árbol africano) actúa recubriendo la piel con una película invisible que evita la deshidratación y la protege de las agresiones externas, como el sol, el viento o los cambios bruscos de temperatura. Es muy eficiente en la regeneración de la piel, calma las pieles irritadas, es el más efectivo de los antienvejecimiento que existen en la naturaleza.

La combinación de estos tres componentes, sumado a su discreto perfume y su tacto cremoso, hacen de este gel un verdadero placer para la ducha diaria.

3- Gel de ducha Argán de la marca Deliplus (Mercadona).: este gel elaborado con aceite de Argán, soja y manteca de karité está especialmente indicado para pieles muy secas y sensibles. Con una fórmula intensamente nutritiva (pues al tacto parece una crema hidratante), protege, cuida y regenera la piel. Desde mi punto de vista es extraordinariamente hidratante, con perfume suave e hipoalergénico. Desconozco las cantidades de aceite de Argán que posee, pero, en todo caso, funciona bien y es muy barato.

Si tuviese que quedarme con uno de los tres, escogería, sin lugar a dudas, el primero, sin que por ello los otros dos desmerezcan. La razón son la calidad, las proporciones de sus componentes, el aroma embriagador y el cariño con el que siempre me es regalado por una gran amiga. Gracias, Susana, por regalarme tantas veces esta gragea de la felicidad o en este caso de "placer" para mi ducha.