Hoy me decido por un artículo crítico y en defensa de la belleza natural de cada una de nosotras. ¡Cuántas mentiras nos cuentan! Vivimos en una sociedad que nos asfixia con la constante búsqueda de la perfección de nuestros cuerpos. Nos acribillan con numerosos anuncios sobre cremas antiarrugas, antiflacidez, anticelulíticas, reafirmantes, antiestrías, reductoras... Y para más "inri" nos recalcan frases como "porque tú lo vales". Claro, si no utilizas estos productos, no vales nada. En fin, toda esta publicidad para mí es antimujer.
Una de las primeras cosas que recalcan los dermatólogos es que las cremas antiarrugas no existen; sí, duele oírlo, pero es la pura realidad. Las arrugas se forman por diversas causas: disminución del colágeno, factores genéticos, expresiones faciales habituales (marcas de expresión), la exposición al sol o al viento, climas muy secos, el tabaco, una hidratación pobre y el INEVITABLE envejecimiento, que acompaña irremediablemente al ser humano.
Se puede prevenir en cierto grado el envejecimiento prematuro de la piel, es decir, podemos hacer algunas cosillas para evitar que nuestra piel se estropee antes de tiempo, pero no hay productos milagrosos, si no ¿por qué las famosas hacen tanta cirugía plástica? Aunque la verdad, prefiero tener arruguillas y no quedarme como Nicole Kidman. ¡Qué destrozo ha hecho esta mujer consigo misma! Pasó de ser una chica preciosa a lo que yo llamo "una mujer momificada", pues, a duras penas, consigue gesticular.
Os dejo aquí un listado de cosas que sí funcionan, es decir, previenen el envejecimiento prematuro:
1- Procura beber suficiente líquido para estar hidratada.
2- Aliméntate con productos sanos, evitando la comida basura.
3- Procura dormir al menos entre siete y ocho horas diarias.
4- Evita el tabaco, está demostrado su efecto negativo sobre la piel.
5- No abuses del sol, pero procura ver la luz del día, ya que es imprescindible para la absorción de vitamina D.
6- Utiliza una crema hidratante adecuada a tu piel: seca, mixta, sensible, madura... Pero recuerda que lo importante no es el precio, sino la calidad de sus componentes. A veces las cremas más sencillas y las de toda la vida son las mejores (dedicaré un artículo a estas cremas).
7- No te duches con agua demasiado caliente (esto a mí me cuesta conseguirlo, me encanta el agua muy caliente).
8- Ojo con las dietas y bajar mucho kilos de forma brusca. Las dietas deben estar supervisadas por médicos dietistas y se debe bajar de peso poco a poco.
9- Ríete mucho, no arruga nada, al contrario, ejercita los músculos faciales, además de que te vas a sentir más feliz, si no, fijaos en la de arrugas que tienen los que van por la vida con cara de amargados. Hay que evitar también, en la medida de lo posible, los disgustos, pues también afectan.
10- El sexo también es una fuente fundamental antiarrugas, pues libera stress y ayuda a segregar sustancias beneficiosas para la salud.
Resumiendo, procura ser feliz y quererte a ti misma, pues, como me dijo una vez una dependienta de un hipermercado, "todas somos princesas".
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